Como cuando en los años 90 decían que nosotros pasearíamos en carros voladores y tendríamos robots que hicieran todo por nosotros en nuestras casas, como cuando se esperaba que la televisión uniera familias entorno a una diversión y resulta que es un motivo de descuido en la convivencia familiar, así como se esperaba que el automóvil fuera una herramienta para ir a cualquier parte en cuestión de minutos y se formaron los embotellamientos, como cuando no piensas que algo así pueda ocurrir en tu familia y de repente ya habían ocurrido muchas cosas, así me siento hoy.
Tenía expectativas muy diferentes a esta edad de las que hoy en día sé que estoy viviendo porque, afrontemoslo todos pensamos una vez así.
- Pensaba en que a los 15 me dejarían maquillarme muy a mi gusto, tengo 19 y siguen insistiendo en prohibirme hacerlo
- Pensaba que a los 18 o 20 conduciría un carro, y me lo prohíben por la carrera que tengo
- Pensaba que para 2010 darían con la maquina para regresar el tiempo, pero creo que por muchas razones Frikies eso no pasará XD
- Pensaba que habría ya hecho un viaje o dos por mi misma y eso tampoco sucederá, no con los problemas que enfrenta el país
- Pensaba que a mi edad podría salir a fiestas masivamente y no se puede ya sea por los estudios, mis ganas cansadas, o mis permisos
- Pensaba que a cierta edad ya habría conocido muchas experiencias felices y amores tiernos que se convertirían en amigos, y jeje no es así
Yo pensaba muchas cosas y esperaba muchas cosas, y de mi carrera también sentía lo mismo, que sería para mi algo más fácil por ser mi vocación y porque realmente era buena y estudiaba bastante y sé que se necesita mucho más que eso y es lo que estoy dispuesta a lograr.
Sea como sea esperaba muchas cosas y no todas se van realizando pero... algún día sí, y para eso... no debe haber prisas... las cosas a su tiempo y si puedo esforzarme por conseguirlas... mejor :D
No estes triste,Rosa púrpura, todo llega en su debido momento... todavia eres muy joven, tienes toda la vida por delante,paciencia y se feliz con todo lo que tienes que ya es mucho.
ResponderEliminarGracias Malvaloca, saludos (:
ResponderEliminarAtte: Cecy (Rosa Púrpura)
Hay que aprender a ser pacientes y por lo visto tu ya lo has hecho, y eso es bueno, muy bueno.
ResponderEliminarUn saludo, te sigo!
Efectivamente, pero lo curioso es que también es muy difícil ser paciente... (:
ResponderEliminarGracias Sucio Vagabundo por leerme (:
Saludos atte:
Cecy (Rosa Púrpura)
Bueno, desde pequeños, nos pintan una vida color de rosa, luego conforme vamos creciendo, nos vamos dando cuenta de las adversidades y de la mala presentación del color que en realidad tiene la vida (Que ha de estar entre el rosa mexicano o el violeta turbio).
ResponderEliminarYo a esta edad he cumplido demasiadas expectativas y sueños que aquel quinceañero veía imposibles, pero como todo buen ser vivo, visionario y comprometido con mi época, procuro no perder esa sed de seguir avante.
Lo suyo es más complejo, tiene ciertas restricciones por la cultura y su entorno, pero no deben ser impedimentos. La paciencia mándela a volar y cumpla sus propósitos sin intermediarios, mucho menos el tiempo.
Saludos
Míkel
Vamos creciendo y se van perdiendo las ilusiones acerca de muchas cosas.
ResponderEliminarMe agradan siempre tus comentarios Míkel F. Deltoya, aunque perdiera la paciencia, las restricciones seguirían presentes ya que esas son difíciles de hacer a un lado, son cosas que por muchas razones tienen sus pros y contras. Me encuentro pensando entre estas ideas que se contraponen: acceder a hacer las cosas o detenerme.
ResponderEliminarEs cierto Sort, se pierden muchas y a veces se pierden de formas muy crueles, pero si pensamos, ¿por qué las películas para niños son diferentes de las películas para adultos? Porque en los primeros el final es toda una ilusión en el vivieron felices por siempre...
ResponderEliminarEl segundo es un final más de acuerdo a la realidad y a la madurez de las decisiones, no todos viven felices por siempre o no siempre se puede ser feliz con lo que se vive...
A veces lo mejor es hacer caso a esta frase:
La felicidad está en las cosas que no planeas, en las que no ves venir.