Destinatario

Estas son sólo notas de olvido, recibos injustificados, cartas de silencio y telegramas melancólicos que una mujer de vena negra escribió.

domingo, 3 de julio de 2011

Hola, no cierres tus ojos...


Hola no cierres tus ojos, con especial elocuencia te lo imploro, te lo pido si me llegarás a negar que yo me vuelvo loca, loca si no te puedo amar, así como las tristezas sucumben yo caigo de rodillas, cuanto más dulce y sublime se vuelve tu cariño; hola no cierres tus ojos, con especial delirio te estoy llamando, me he vuelto loca, sí y no podrás negarlo, que con todo tu castigo terminé yendo hasta con el quiropráctico por eso caigo de rodillas en mi soledad sollozando para cuando abras tus ojos y mires, veas que ya te he olvidado. Todo porque es más delgado más estrecho tu cariño lleno de amarga hiel y crudo desamparo.


Despiértame vida que ando volando
dos ojos se esconden en un fondo claro
lampiña es el alma, cuerpo es del sano
en que todo se eleva sobrellevando
(Venas de veneno)

Veneno es lo que corre cuando te quedas callado
ira es la rabia de tus celos de infierno
rompes silencios solo con llantos ahogados
y yo la paciencia de contigo seguir fingiendo

Me cansan tus venas llenas de veneno
me asquean tus ansias de seguirme mintiendo
cansada de escucharte reprochar en desacuerdo
cualquier cosa desde tu desaparición en enero

Me cansa tu callado optimismo, nulo diría
desde mis alergias a tus dramáticas salidas
desde tus amenazas más simples en mi vida
hasta tus sutiles indignadas muescas de vigilia

Eres un veneno venoso que recorre la espina
un miedo en el torrente sanguíneo frío andrajoso
algo como las enfermedades y dolorosa ortiga
no te vas se queda haciendo destrozos

Así como la grandiosa idea de herirte
la maravillosa idea de dejarte encareciendo
de cariño, de tu mayor ego, que yo te ame
pues ¿qué crees? ya dejé de hacerlo.

2 comentarios:

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